Paco Moral
El juez del caso «La manada» no admite los mensajes de grupo como prueba, pero admite un informe encargado por uno de los acusados en el que se espía la vida privada de la víctima. Porque lo realmente importante no es una violación en grupo por parte de una cuadrilla de miserables, sino si la víctima es capaz de rehacer su vida después, entrar en redes sociales, tomarse una caña con una amiga… La cultura de la violación, el terrorismo machista a nivel vómito. Y los acusados pidiendo que no se difundan sus fotos en redes sociales, que tienen derecho a la intimidad, a la presunción de inocencia. La víctima no tiene el derecho a ninguna presunción que no sea la de consentidora. Sí, sería una auténtica pena que las fotos de estos tipos se viralizaran, que circularan por redes sociales presumiendo que son una caterva de canallas, yo desde luego no pienso exhibirlas.